domingo, 1 de noviembre de 2009
SIGNOS DE PUNTUACIÓN
miércoles, 7 de octubre de 2009
EL PUNTO
Me dirijo Ud, Sr. Presidente, para aclararle que nunca quise ofender a nadie. Creo que se han malinterpretado mis palabras. Si es que yo me expliqué mal, ruego me perdonen.A la salida del colegio, dimos un paseo por los jardines del El Retiro. Era una gozada ver La Rosaleda en plena primavera. Jamás había contemplado tantas rosas tan bonitas. Montamos un ratito en barca. Eso nos encantaba a todos.
Ejercicio 2: Escribe punto donde sea necesario y cambia de línea lo más cerca posible de final de la caja; cortando las palabras, si es preciso, para que practiques. No olvides colocar mayúscula después del punto.
Muy contentos, saludamos a la Srta. Isabel, que había sido nuestra profesora. No nos dio tiempo a saludar al Rvdo. P. Director que, como siempre, iba con mucha prisa.Revisando las cuentas, encontramos dos facturas no muy claramente justificadas: una de 17.425 ptas. y otra de 1.238.570 ptas. D. Enrique, nuestro jefe, se encargó de llamar al teléfono 4952835 para que le aclararan el tema.
Ejercicio 3: Escribe punto donde sea necesario y cambia de línea lo más cerca posible de final de la caja; cortando las palabras, si es preciso, para que practiques. No olvides colocar mayúscula después del punto.
Dª. Victoria Hernández Gil nació en el año 1968. Figura en el Registro con el nº. 978 en la pág. 2325.Cervantes nació en Alcalá de Henares (Madrid).Comenzó a caminar por el antiguo y conocido campo de Montiel (y era verdad que caminaba por él).Tengo cincuenta años. (Llevo más de veinte en la empresa).
LA COMA.
El sosiego, el lugar apacible, la amenidad de los campos, la serenidad de los cielos, el murmurar de las fuentes, la quietud del espíritu, son muy importantes para que las musas se muestren fecundas.
Ejercicio 2: Escribe las comas donde sean necesarias y cambia de línea lo más cerca posible de final de la caja; cortando las palabras, si es preciso, para que practiques.
Tienes que estudiar mucho, hijo mío, para llevar buenas notas.
Presiento, mi querido amigo, que vas a llevarte un desengaño.
Sálvanos, socorrista, que nos ha dado un calambre.
Las señoras lloran, las niñas cantan, los hombres se van, el verdadero calor viene, porque es necesario que llegue el buen tiempo para que crezca el amor.
Ejercicio 3: Escribe las comas donde sean necesarias y cambia de línea lo más cerca posible de final de la caja; cortando las palabras, si es preciso, para que practiques.
Había en Roma, en aquella ocasión, españoles de todas partes: castellanos, gallegos, canarios, valencianos, mallorquines, andaluces...
Los frutos del espíritu son: amor, gozo, paz, riqueza, bondad, larga espera, mansedumbre, fe, modestia, templanza y limpieza.
El sol baña, alegra, ilustra, fecunda e influye.
Tu hermano sí me hizo caso; tú, no.
Año de nieves, año de bienes.
Ejercicio 4: Escribe las comas donde sean necesarias y cambia de línea lo más cerca posible de final de la caja; cortando las palabras, si es preciso, para que practiques.
La gallardía de su persona, la majestad de sus modales, la viveza y prontitud de su ingenio, ayudados de una conversación fácil, le ponían a su favor los ánimos de todos.
Dicen de Venecia, la reina del Adriático, que es la capital del romanticismo.
El ladrón, que lo había escuchado todo, corrió a darles las noticias.
Y llegando las vísperas de las fiestas, toda la ciudad se pone en movimiento.
Yo creo que, atareados como estamos todos, lo mejor será que cada uno se vaya a su trabajo.
EL PUNTO Y COMA
El remordimiento es castigo del criminal; el arrepentimiento es su pena.
Se puede vivir sin dinero, sin crédito, sin estima; pero es imposible vivir sin esperanza.
Si miras a los ricos, te sentirás pobre; pero si miras a los desgraciados, te considerarás feliz.
Ejercicio 2: Escribe punto y coma donde sea necesario y cambia de línea lo más cerca posible de final de la caja; cortando las palabras, si es preciso, para que practiques.
La madre es la que comparte con nosotros los infortunios y los males; la que vela nuestro sueño; la que cuenta por segundos las horas de nuestro padecer; la que cierra nuestros párpados a la hora de descansar.
Ejercicio 3: Escribe punto y coma donde sea necesario y cambia de línea lo más cerca posible de final de la caja; cortando las palabras, si es preciso, para que practiques.
Poco a poco fue fabricando todo lo que necesitaba. El primer año miraba sin cesar el horizonte; el segundo, sólo a veces; el tercero, nunca.
Su vida en la isla era tranquila; ya llegaría el día en que tendría que volver a su antiguo mundo.
El viento, furioso, silbaba sin cesar; las olas, como grandes montañas de espuma, pasaban por encima del barco; los truenos taladraban la noche.
lunes, 5 de octubre de 2009
Secretos de la genética
Juana La Loca (II)
domingo, 4 de octubre de 2009
La historia del fallecimiento de Felipe El Hermoso
domingo, 27 de septiembre de 2009

Juana
Juana hija de Isabel y Fernando, los Reyes Católicos, tiene de sobrenombre
Muy pronto, a Juana, se le manifestó una vena mística que ella pretendió encauzar haciéndose monja. Pero sus padres quisieron que, a los 16 años, Juana se casara con el archiduque Felipe de Austria, conocido con el sobrenombre de El Hermoso.
Los cónyuges, nada más verse, sintieron una atracción, deseando consumar el matrimonio cuanto antes.
El matrimonio, no cambió la actitud de Felipe, que mantenía relaciones sexuales con las damas de la corte, y Juana, empezó a tener cada vez más celos, y a confiar menos en su marido.
A pesar de todo, Juana y Felipe, tuvieron 6 hijos;
El primer parto fue el 15 de noviembre de 1498, una niña llamada Leonor.
El segundo parto tuvo lugar el 24 de febrero de 1500, naciendo su hijo Carlos.
El tercer parto se produjo en 1501, naciendo una niña llamada Isabel.
El cuarto y quinto parto se produjeron en 1503 y 1505, el cuarto hijo se llamó Fernando, y la quinta María.
Felipe, el 25 de septiembre de 1507 fallecía tras beber agua helada, después de jugar un partido de pelota.
Más tarde, Juana, daba a luz a su sexta y última hija, Catalina, nacida el 14 de enero de 1507.
Dando muestras de enajenación mental, Juana no se cambiaba de vestido ni se aseaba e iba acompañada del féretro de su esposo, se decidió que fuese encerrada en Tordesillas. Allí moría tras estar 46 años encerrada, cubierto su cuerpo de llagas al negarse a ser aseada y cambiada de ropa.